Diversas observaciones presupuestarias y contables en la Municipalidad de Teno efectuó la Contraloría Regional del Maule pocos meses antes del cambio de administración que dejó en el sillón alcaldicio a la ex concejal Sandra Améstica.

Dentro del documento (ver aquí) figuran más de $160 millones registrados en las cuentas como «ingresos por percibir» correspondientes a subsidios por licencias médicas que aún estaban pendientes de cobro.

El pronunciamiento, emitido el 19 de abril de 2021, indica que la unidad de finanzas del Departamento de Educación Municipal (DAEM) estaba «revisando desde el año 2018 en adelante las licencias con el fin de validar el monto traspasado para el año 2021», área en la cual existía, al mes de diciembre de 2020, un saldo de períodos anteriores de $137.913.981.

Tal como explica una nota del diario El Mostrador, «a diferencia de las empresas privadas, los empleados de instituciones públicas siguen percibiendo sus remuneraciones habituales durante los días en que hacen uso de su licencia, de forma que los que tienen la obligación de cobrar dicho monto son los propios servicios públicos» ante el organismo de salud al cual se encuentren afiliados dichos trabajadores.

Por este motivo, agrega la publicación, es de «vital importancia la gestión en torno a la recuperación de estos fondos, dado que estos ‘compensan’, total o parcialmente, el gasto que implica para el Estado el pago de las remuneraciones del personal ausente en sus funciones públicas en los días que hacen uso de licencias».

DESVÍO DE RECURSOS

Según logró establecer Teno Informado, existen al menos 17 trabajadores de la Municipalidad de Teno que, en forma indebida, cobraron ellos mismos los fondos que debía percibir el municipio en materia de licencias médicas.

La cifra total de dinero supera los $20 millones, concentrándose el mayor desvío en una profesional que habría recuperado más de $6 millones por sí sola. Todos los casos corresponden al DAEM y solo parte de ellos han derivado en reintegros completos o parciales de los montos, con pagos en cuotas.

La información de malas prácticas en este ámbito ya era conocida por la alcaldesa Sandra Valenzuela, quien abrió en el año 2017, a exigencia de Contraloría, un sumario para establecer responsabilidades internas luego de que una funcionaria del DAEM percibiera al mismo tiempo, y de forma ininterrumpida, sus remuneraciones y los subsidios de licencias médicas entre 2013 y 2015.

Como ya fue publicado por este portal informativo, Contraloría observó que el municipio no investigó el hecho en forma rigurosa, ya que solo tomó declaraciones al entonces jefe del DAEM, Claudio Vergara, y a la encargada de decretos del Departamento, Maritza Valenzuela, quienes responsabilizaron a la entidad previsional Consalud por dicha irregularidad (ver oficio).

Actualmente, el expediente sigue abierto y no ha habido sanción para los involucrados.

DINERO EN LAS ARCAS

A petición del concejal que firma esta nota, el nuevo jefe del DAEM, Jorge Díaz Morales, informó por oficio el proceso de recuperación de licencias médicas que se está desarrollando bajo la alcaldía de Sandra Améstica (ver aquí).

«Podemos señalar que se han recuperado $96.671.343 (noventa y seis millones seiscientos setenta y un mil trescientos cuarenta y tres pesos), por lo que el Departamento sigue realizando las gestiones pertinentes para recuperar las licencias médicas pendientes, y en caso de que éstas sigan siendo rechazadas después de las respectivas apelaciones, poder comenzar los respectivos cobros judiciales», indicó.

Los antecedentes ya están siendo estudiados por Contraloría y el Consejo de Defensa del Estado.

Por Matías Rojas

Periodista.

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