La Contraloría Regional del Maule ordenó un proceso disciplinario para establecer las eventuales responsabilidades comprometidas en la actuación del director de Control de la Municipalidad de Teno, Marcelo Díaz, al intervenir en pagos realizados a una constructora cuyos dueños son familiares de él.

La determinación se origina a raíz de una presentación efectuada por los concejales Matías Rojas, María Ester Muñoz y Mauricio Rojas, en la cual se observaron distintos hechos relacionados con las etapas de diseño, ejecución y recepción de obras realizadas por la empresa Futuro, encargada de efectuar mejoramientos a los baños de la Escuela D-56 y el Liceo Teno durante el año 2021 (ver oficio aquí).

El organismo confirmó que, en relación al proyecto denominado «Conservación Escuela Teno», el contratista ejecutó una obra extraordinaria por $1.398.797, sin existir un decreto oportuno de la alcaldesa Sandra Améstica para autorizar los trabajos, situación que afectó el «control técnico eficaz» que le correspondía hacer al municipio.

A su vez, pudo corroborar que los artefactos sanitarios (WC) proyectados e instalados en ambos establecimientos de enseñanza básica y media, «no contaban con una adecuada presión de servicio mínima para su adecuado funcionamiento y descarga presurizada, a fin de cumplir con las recomendaciones del fabricante», lo que motivó incurrir en gastos adicionales por más de siete millones de pesos.

En relación a este punto, la Contraloría indicó que la autoridad comunal deberá «adoptar las medidas tendientes a reforzar las disposiciones, requerimientos y características técnicas que deben considerarse en la etapa de diseño, a fin de asegurar una correcta ejecución de las iniciativas, evitando gastos adicionales para la administración, conforme a la obligación que le asiste… de velar por que la obra quede completamente definida en los antecedentes de la licitación».

Finalmente, la auditoría corroboró la existencia de una relación de parentesco de cuarto grado de consanguineidad entre Marcelo Díaz, director de Control del municipio, y dos de los socios de la empresa Futuro Construcción Limitada, «hecho que no se ajusta a lo prescrito en los incisos sexto y séptimo del artículo 4° de la ley N° 19.886», aseguró.

En sus descargos, el municipio reconoció que Díaz intervino directamente en la revisión y aprobación de ocho decretos de pago a favor de la empresa en cuestión, «respecto de las licitaciones ID N°s 834259-21-LP20 ‘Construcción Sala de Máquinas 4ta. Compañía del Cuerpo de Bomberos de Teno’, 3695-16-LE21 ‘Conservación Escuela Teno’, y 3695-33-CO21 ‘Conservación Liceo Polivalente de Teno'», así como también «hizo observaciones al proceso licitatorio ID 3695-51-L121 ‘Reparación Taller Mecánico Liceo Teno'».

Según el oficio, dicha actuación «podría contravenir especialmente el principio de la probidad administrativa», ya que la ley N° 19.880 prescribe que los servidores públicos deberán abstenerse «en caso de tener parentesco de consanguinidad dentro del cuarto grado o de afinidad dentro del segundo, con cualquiera de los interesados» en la materia sobre la cual se interviene.

La Contraloría otorgó un plazo de 15 días hábiles para que la alcaldesa Améstica remita copia del documento que dispondrá la investigación administrativa contra el funcionario, cuya tarea es precisamente verificar la legalidad de los actos municipales.

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